La autoestima es el resultado de la relación que mantienes contigo mismo, es decir; nuestra autoestima la forman pensamientos y actitudes que tenemos acerca de nosotros mismos, porque tú eres la persona con la que pasas la mayor parte del tiempo.
Cuando nuestra autoestima se nutre de pensamientos positivos así como una actitud proactiva ante la vida, podemos conseguir todo aquello que nos proponemos.
Lo enemigo de la autoestima son los pensamientos que empiezan con: "Tengo que....", "Debo de ....", "Necesito de....", "Debería de ....", cuando esto ocurre e identificamos, debemos neutralizar mediante el cambio a "Yo quiero....", y entonces pregúntate, si el pensamiento es verdadero.
Cuando las circunstancias que nos rodean no son las que deseamos, pueden afectar a nuestra situación y en ello entra nuestra actitud para hacerle frente.
La autoestima es nuestra fuente de energía, por ello debemos cuidar nuestros pensamientos y actitudes. Cuando nos caemos o nos enfrentamos a tener que empezar de nuevo, necesitamos tener un alta autoestima para poder hacer frente a los desafíos. "Todos podemos empezar de nuevo".
Dominar algo y cambiar a algo nuevo, es una tendencia natural de personas con éxito. No esperes estar listo para iniciar una nueva etapa, mantén tu mente centrada y controla tus pensamientos. Es como estar parado en la orilla de un trampolín esperando sentirse bien antes de saltar. Seamos sinceros con nosotros mismos, saltar desde lo alto del trampolín (aunque ya lo hayas hecho algunas veces), siempre da miedo.
"El miedo se lo hace uno mismo".
Recuerda que es imposible amar a alguien más de los que tú te amas a ti mismo, y es imposible aceptar más amor de alguien del que tú estás dispuesto a recibir de ti mismo. Habla siempre bien de ti mismo y de los otros.... y espera lo mismo de los demás.
Onesentirsefeliz
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